Una de las rapaces más abundantes de toda Europa, el milano negro, es también una de las más oportunistas y adaptables, ya sea a la hora de reproducirse como en el momento de procurarse alimento. De hábitos bastante gregarios y tendencias decididamente carroñeras, el milano negro es capaz de explotar las más diversas fuentes de alimentación, desde las explosiones de insectos o topillos, hasta los animales atropellados en la carretera, sin olvidar la ingente cantidad de recursos que le ofrecen muladares, basureros, granjas y mataderos.
El milano negro es una especie de distribución muy amplia, que ocupa la mayor parte de las áreas templadas del Paleártico, África y Australasia. En Europa se presenta desde el Mediterráneo hasta zonas menos frías de los países nórdicos, si bien los núcleos poblacionales más importantes se encuentran en Rusia, España, Francia y Alemania.
Dentro de nuestro territorio se distribuye preferentemente por las regiones del norte y el oeste, en particular a lo largo de los valles de los grandes ríos, así como en dehesas de Extremadura, Castilla y León, Aragón y en las zonas bajas de los Pirineos, Cordillera Cantábrica y Sistema Central. No aparece, sin embargo, en gran parte de la franja costera mediterránea, en extensas regiones de Castilla-La Mancha, Andalucía oriental y Sistema Ibérico y presenta una distribución fragmentada en Galicia y Asturias. El milano negro, rapaz de mediano tamaño y coloración general bastante oscura, se caracteriza por poseer unas alas más bien largas, así como una larga cola ahorquillada, si bien bastante menos que la de su cercano pariente, el milano real, que ofrece un aspecto más estilizado y es de mayor tamaño.
El adulto luce una coloración considerablemente oscura en conjunto, aunque con la cabeza de color grisáceo y finamente listada
Estado amenaza:
PREOCUPACION MENOR LC
Época observación:
Fuente: wikipedia